Los programas de fisioterapia de nuestras entidades usan grupos específicos de ejercicios y actividades para trabajar hacia dos metas importantes: evitar el debilitamiento o el deterioro de los músculos que no se usan (atrofia por desuso) y evitar que los músculos se fijen en una posición rígida y anormal (contractura).
Los niños y niñas que crecen normalmente estiran sus músculos y tendones cuando corren, caminan y se mueven en sus actividades cotidianas. Esto asegura que sus músculos crezcan a la misma velocidad que sus huesos. Pero en los niños y niñas con parálisis cerebral, la espasticidad impide que los músculos se estiren. Como resultado, sus músculos no crecen lo suficientemente rápido para mantenerse al ritmo de los huesos en crecimiento.
En adultos la fisioterapia tiene como objetivo primordial no perder la funcionalidad en el aspecto motor y musculo-esquelético mediante distintos tipos de técnicas que trabajan la mejora de control motor, el equilibrio, la fuerza, la estabilidad articular y la resistencia cardio-pulmonar. Se fomenta el fortalecimiento y potenciación del músculo espástico, la reducción de contracturas musculares, la reducación de la marcha, la potenciación del sistema propioceptivo, el incremento tanto del control motor selectivo como del control postural y la mejora del equilibrio con distintas técnicas.
Gracias a la fisioterapia, se consigue ayudar a estas personas aliviando su dolor o mermándolo, evitando que la musculatura se atrofie, corrigiendo su postura y retrasando el deterioro muscular.
Desde ASPACE Extremadura queremos agradecer y reconocer el gran trabajo que realizan estos profesionales en el día a día de las personas con Parálisis Cerebral y discapacidades afines felicitándoles por el Día Mundial de la Fisioterapia.